Ammar y su pareja están encantados ante la perspectiva de adoptar a su primer hijo.
La pareja del mismo sexo acaba de iniciar el proceso de adopción en Melbourne, donde Ammar, de 36 años, trabaja como dentista.
De regreso en Irak, ni siquiera se había atrevido a soñar con la posibilidad de una relación real, y mucho menos una familia.
Desde los 12 años, Ammar creció confundido y temeroso de sus propios sentimientos, mientras veía a la comunidad LGBT que lo rodeaba enfrentar acoso, agresión e incluso asesinato.
Las personas LGBT iraquíes pronto podrían enfrentarse oficialmente a la pena de muerte en virtud de una ley propuesta el mes pasado y que actualmente se encuentra ante el parlamento.
Aunque la ley aún está bajo revisión, grupos de derechos humanos dicen que la propuesta ya ha provocado una escalada del sentimiento anti-LGBT.
En protestas recientes, se quemaron banderas LGBT y las imágenes mostraban a hombres firmando promesas contra la homosexualidad frente a las mezquitas.
El mes pasado, la Comisión de Medios y Comunicaciones de Irak ordenó a todos los medios de comunicación, incluidas las redes sociales, que reemplazaran el término “homosexualidad” por “desviación sexual”. También se prohibió la palabra “género”.
Si se aprueba la nueva ley, los ciudadanos iraquíes se enfrentarán a la muerte o cadena perpetua por relaciones entre personas del mismo sexo, un mínimo de siete años de prisión por “promover la homosexualidad” y hasta tres años por “imitar a las mujeres”.
Un partidario del clérigo chiíta Muqtada al-Sadr firma un compromiso para hablar en contra de la homosexualidad o LGBTQ, frente a una mezquita en Kufa, Irak.
Raad Al-Maliki, un miembro independiente del parlamento, presentó el proyecto de ley, diciendo que tenía como objetivo «preservar la entidad de la sociedad iraquí de la desviación y apela a la ‘parafilia’ (impulsos sexuales anormales) que han invadido el mundo.»
Sharif Suleiman, del Partido Democrático del Kurdistán, dijo al medio estatal Al-Sabah que la legislación propuesta refleja «nuestros valores morales y humanos y nuestras luchas contra fenómenos sociales anormales».
Aunque las leyes existentes no penalizan abiertamente las relaciones entre personas del mismo sexo, en el pasado se ha utilizado a menudo una ley contra los «actos inmodestos» para condenar a los miembros de la comunidad LGBT.
‘Miedo constante a ser cazado’
Si se aprueba la nueva ley, los activistas y muchos iraquíes como Ammar temen que la situación se deteriore rápidamente.
“Si encuentran a alguien, probablemente lo torturarán, probablemente lo agredirán sexualmente (escuché muchas historias en casa sobre la policía) y luego lo matarán y arrojarán sus cuerpos a la calle”, dijo Ammar, quien, todavía asustado, pidió que lo llamaran sólo por su nombre.
